Densidad

Por estos días he pensado mucho en la necesidad, a veces enfermiza, de tener estructura y orden en nuestros pensamientos. Nos empeñamos en pensar de manera lineal, sin tener en cuenta que muchas veces chocamos con situaciones que no tienen una sola solución o que simplemente no pueden resolverle aplicando conceptos clásicos. Como dice esa famosa frase: “Somos lo que pensamos”, y esta obsesión se traduce en una visión muy distorsionada de la realidad. Incluso generamos una adicción a lo complejo, desechando automáticamente el sentido común, buscando explicaciones retorcidas hasta para lo más sencillo. Percatarse de esto es a veces muy desagradable, y el proceso para recuperar el equilibrio es largo y laborioso. Me gusta más aquello de que “Simple is beautiful”, aunque no siempre lo recuerde cuando estoy en medio de la complicación constante en que hemos convertido la vida diaria.